
Nueve países han notificado casos en 2025, siendo Canadá (3.170 casos, 1 defunción), México (2.597 casos, 9 defunciones) y Estados Unidos (1.227 casos, 3 defunciones) los que concentran la mayor cantidad de casos y defunciones. Otros países que también han reportado casos son Bolivia (60), Argentina (34), Belice (34), Brasil (5), Perú (4) y Costa Rica (1). Los brotes se originaron a partir de importaciones desde otros países fuera y dentro de la región. Los grupos etarios más afectados son los niños menores de 5 años y los adolescentes de entre 10 y 19 años.
El aumento de casos pone de relieve la necesidad de cerrar las brechas en la vacunación de rutina. La OPS hace un llamado a los países para alcanzar y mantener una cobertura del 95% con dos dosis de la vacuna contra el sarampión, especialmente en comunidades con baja cobertura o brotes activos.
La OPS está brindando cooperación técnica a la mayoría de los países para fortalecer la vigilancia epidemiológica, capacitar al personal de salud y trabajar con las comunidades para garantizar la detección oportuna y una respuesta efectiva. Para contener los brotes y prevenir la propagación de esta enfermedad prevenible por vacunación, la OPS recomienda implementar rápidamente campañas de vacunación intensificada en las zonas afectadas y en aquellas en riesgo de expansión. La Organización desaconseja aplicar restricciones al tráfico internacional.
Esta tendencia al alza refleja también la situación a nivel mundial. Según los datos de vigilancia de la Organización Mundial de la Salud (OMS), hasta el 6 de junio de 2025 se habían registrado 188.355 casos sospechosos y 88.853 confirmados en 168 países. La Región del Mediterráneo Oriental concentra el mayor porcentaje de casos (35%), seguida de la Región de África (21%) y la Región de Europa (16%).