El informe Creación de empleo y desarrollo económico local 2024 concluye que, tras una década de crecimiento del empleo, más de la mitad de las regiones de la OCDE habían alcanzado tasas de empleo superiores al 70% en 2023, y que más mujeres se habían incorporado a la fuerza laboral, lo que redujo la brecha de género en la participación en la fuerza laboral en el 84% de las regiones de la OCDE.
El auge del empleo también ha provocado escasez y brechas de mano de obra a nivel regional, en particular en regiones urbanas densamente pobladas como Lombardía (Italia) y Hamburgo (Alemania), así como en regiones que luchan contra el declive y el envejecimiento de la población.
En este contexto, la IA generativa tiene el potencial de ayudar a abordar la escasez de mano de obra y aumentar la productividad. Sin embargo, el informe destaca importantes disparidades regionales en el grado en que los empleos se ven afectados por la IA generativa: la proporción de trabajadores con empleos expuestos a la IA varía del 45 % en regiones urbanas como Estocolmo (Suecia) y Praga (República Checa) al 13 % en regiones rurales como Cauca (Colombia).
Los trabajadores urbanos tienen más probabilidades de verse afectados: un promedio del 32 % ya está expuesto a la IA generativa, en comparación con solo el 21 % de los trabajadores rurales. Esta tendencia podría agravar las brechas de ingresos y productividad existentes entre las zonas urbanas y rurales, así como las brechas digitales entre regiones.
Según el informe, las regiones que antes se consideraban con un riesgo comparativamente bajo de automatización ahora se encuentran entre las más expuestas a la IA generativa. Si bien la automatización impulsada por la tecnología ha afectado históricamente a las regiones no metropolitanas y manufactureras, ahora las áreas metropolitanas, los trabajadores altamente calificados y las mujeres enfrentan una mayor exposición, ya que la IA generativa se destaca en la realización de tareas cognitivas y no rutinarias.